viernes, 22 de junio de 2018

Gran respaldo.

Buen día mi amado amigo, mi amada amiga, que la gracia del Padre, el amor del Hijo y la comunión del Santo Espíritu este sobre tu vida, que el Espíritu Santo nos de revelación de la Santa Palabra.

Que hermoso es saber que somos llamados a llevar la Palabra de Dios a las demás personas compartiendo con ellas la misericordia, el poder y la gloria de nuestro Padre, sin embargo; muchas veces nos sentimos limitados por el temor de abrir nuestra boca y decir palabras inadecuadas; la porción del Pan diario del día de hoy nos relata lo que el Padre le respondió a Moisés cuando él quiso negarse a abrir su boca ante faraón; te invito a leer conmigo:

Éxodo 4:11 (RVR1960)

11 Y Jehová le respondió: ¿Quién dio la boca al hombre? ¿o quién hizo al mudo y al sordo, al que ve y al ciego? ¿No soy yo Jehová?

¿Quién te dio el don del habla? ¿Quién esta contigo a todo instante? Si la respuesta es que Dios, Jehová, el Creador, nuestro Padre es quien esta a nuestro lado entonces no tenemos que temer para abrir nuestros labios y compartir de la Palabra que Él ha puesto en nuestra boca; recordemos que somos llamados a llevar la Palabra igual que Moisés a las demás personas; somos llamados a dar testimonio cada día; tenemos la obligación de ayudar a las personas a salir de la esclavitud del pecado y de la muerte de la cual en otro tiempo nosotros mismos éramos esclavos.

Llena ti vida de la presencia de Dios, escudriña su Palabra, pide al Espíritu Santo que sea tu guía y ve a la persona que sabes necesita en este momento escuchar el mensaje de liberación; recuerda que eso es lo que a nuestro Padre verdaderamente le agrada; se un mensajero tal como dice en Romanos 10:15 “¿Y cómo predicarán si no fueren enviados? Como está escrito: !!Cuán hermosos son los pies de los que anuncian la paz, de los que anuncian buenas nuevas!” Recuerda que has sido enviado a llevar el evangelio.

Oremos: amado y poderoso Rey; estamos delante de tu trono agradecidos porque nos recataste del reino de las tinieblas y nos das la oportunidad de compartir de tu Palabra con las demás personas; gracias porque podemos abrir nuestra boca para dar testimonio de tu amor, bondad y poder; te pedimos en el nombre de tu amado Hijo que nos des Palabra de consuelo, fortaleza y esperanza para compartir con quienes lo necesitan, amén.

Pido al Padre que este hermoso viernes seas colmado de las más abundantes y ricas bendiciones del Todopoderoso Señor.

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