miércoles, 2 de mayo de 2018

Verdadero perdón.



Buen día mi amado amigo, mi amada amiga, que la gracia del Padre, el amor del Hijo y la comunión del Santo Espíritu este sobre tu vida, que el Espíritu Santo nos de revelación de la Santa Palabra.

¿Alguna vez alguien te ha ofendido? Estoy seguro de que así es; todos de una u otra forma hemos sido lastimados, ofendidos, e inclusive, agredidos por otra persona; cuando eso sucede queda en nosotros perdonar a esa persona y continuar con nuestra vida, o arraigarnos a ese recuerdo y sentir la herida abierta; la porción del Pan Diario del día de hoy nos habla sobre el verdadero perdón, te invito a leer conmigo:

Isaías 43:25 (RVR1960)

25 Yo, yo soy el que borro tus rebeliones por amor de mí mismo, y no me acordaré de tus pecados.

El perdón más puro y grande es que nos demuestra nuestro amado Padre, Él nos enseña que el verdadero perdón es una decisión que debemos tomar cada uno de nosotros; esto no es cuestión de que un día voy a sentir hacerlo porque en nuestra humanidad siempre deseamos la venganza; en cambio nuestro Padre nos demuestra que el perdón es un acto consiente en el que decidimos hacerlo y cuando los pensamientos de dolor vienen a nuestra mente debemos rechazarlos.

Imaginemos por un instante que Dios no nos perdona, imaginemos que Él tiene memoria de cada acto de maldad que hemos hecho y las veces que hemos lastimado a los demás; te aseguro que eso sería catastrófico para nuestro futuro; sin embargo, Él nos promete perdón y desea que nosotros nos perdonemos los unos a los otros, tal como nos dice Mateo 6:14 “Porque si perdonáis a los hombres sus ofensas, os perdonará también a vosotros vuestro Padre celestial;” (RVR1960); sembremos perdón en nuestros corazones y cosecharemos abundancia de paz y tranquilidad.

Te invito a que juntos nos presentemos delante del Trono de nuestro amado Padre en oración: amado Señor, gracias porque nos ofreces perdón de nuestros pecados por medio de tu amado Hijo; gracias porque viniste a reconciliar consigo al mundo por medio de Él; te pedimos que nos ayudes a perdonarnos los unos a los otros y que toda raíz de amargura y resentimiento que hay en nuestro corazón sea quitada en el nombre de tu amado Hijo; ayúdanos a vivir en paz los unos con los otros en ese amor fraterno que pides de nosotros, amén.

Pido al Padre que este hermoso miércoles seas colmado de abundante paz; que el Señor opere en tu corazón quitando todo escollo de dolor que este arraigado en él. Bendiciones.

No hay comentarios:

Publicar un comentario