Todo.

Buen día mi amado amigo, mi amada amiga, que la gracia del Padre, el amor del Hijo y la comunión del Santo Espíritu este sobre tu vida, que el Espíritu Santo nos de revelación de la Santa Palabra.

Cuando en el diario vivir enumeramos todas las necesidades que tenemos podemos ver que existe diversidad en este tema; muchos necesitan dinero, otros amor, otros paz, en fin, hay una lista interminable de elementos que necesitamos en nuestra vida; la porción del Pan Diario del día de hoy nos habla de una poderosa promesa de nuestro Padre, te invito a leer conmigo:

1 Pedro 5:7 (RVR1960)

7 echando toda vuestra ansiedad sobre él, porque él tiene cuidado de vosotros.

Cuando la Palabra nos dice *todo* entonces debemos confiar que nuestro Padre tiene cuidado en todos los ámbitos de nuestra vida, absolutamente todos ellos; por eso nos dice que debemos echar toda nuestra ansiedad sobre Él y reposar esperando y confiando en que de Él vendrá nuestra salvación, nuestra fortaleza, nuestra paz, nuestro sustento, nuestro consuelo; en fin, todo proviene de Él para la gloria de su Hijo.

La Palabra nos dice que nuestro Padre nos desea bendecir y para alcanzar esa bendición debemos ser obedientes y dejarnos ser moldeados en todas las áreas de nuestra vida: la autosuficiencia, arrogancia, vanidad…todo aquello que rompe nuestra relación con el Altísimo debemos dejarlo y creer que de Dios viene nuestra salvación y esperanza.

Mi amado amigo, mi amada amiga; nuestro Padre desea bendecirte grandemente y para que ello suceda solo debes creer en su promesa siendo un hijo obediente a su mandato; recuerda lo que el Maestro nos dice en Juan 11:40 “Jesús le dijo: ¿No te he dicho que si crees, verás la gloria de Dios?”

Te invito a que juntos elevemos una oración delante del Trono de Justicia: amado Padre, Dios creador de todo, nuestro amado y glorioso Señor; en este día queremos darte las gracias porque en tu misericordia y amor deseas proveer para nosotros abundante paz, amor, gozo…porque deseas lo mejor para cada uno de tus hijos e hijas y a cambio solo pides obediencia; te pedimos, en el nombre de tu amado Hijo, que nos ayudes a despojarnos del viejo hombre y a creer en ti cada día para que podamos ver tu gloria manifiesta en nuestro ser, amén.

Pido al Padre que este hermoso domingo seas colmado de toda abundancia y que seas bendecido en todas las áreas de tu vida.