lunes, 26 de marzo de 2018

Pecar por desconocimiento.

Pecado por desconocimiento.

Buen día mi amado amigo, mi amada amiga, que la gracia del Padre, el amor del Hijo y la comunión del Santo Espíritu este sobre tu vida, que el Espíritu Santo nos de revelación de la Santa Palabra.

Son muchas las posibilidades de pecar; muchas veces lo hacemos sin siquiera saber que lo que hacemos es pecado; la porción del Pan Diario del día de hoy habla sobre lo que debemos hacer primeramente, te invito a leer conmigo:

Josué 1:8-9 (RVR1960)

8 Nunca se apartará de tu boca este libro de la ley, sino que de día y de noche meditarás en él, para que guardes y hagas conforme a todo lo que en él está escrito; porque entonces harás prosperar tu camino, y todo te saldrá bien.
9 Mira que te mando que te esfuerces y seas valiente; no temas ni desmayes, porque Jehová tu Dios estará contigo en dondequiera que vayas.

Es solo a través del conocimiento de la voluntad, plan y amor de Dios que estamos preparados para no pecar; solo a través de la Palabra entendemos lo que agrada y desagrada al Padre; es por eso por lo que el Padre le dice a su pueblo escogido que de día y de noche deben meditar en la Palabra para que todo les salga bien.

Aunado a lo que el Padre le dice al Pueblo Santo tenemos lo que el Maestro de maestros nos dice a sus discípulos en Juan 5:39 “Escudriñad las Escrituras; porque a vosotros os parece que en ellas tenéis la vida eterna; y ellas son las que dan testimonio de mí;” vemos entonces un mandato que es de acatamiento obligatorio: debemos escudriñar en la Palabra para saber lo que nuestro Padre desea que hagamos y que le desagrada de nuestras acciones.

Mi consejo para ti en este día: si no lees la Palabra inicia el día de hoy, haz un plan bíblico e instrúyete en ella para que entiendas sobre el bello plan de Dios para la humanidad; si lo deseas escríbeme para que te oriente como puedes hacerlo.

Te invito a que juntos nos presentemos delante del Trono de nuestro amado padre, oremos: amado Padre de toda bondad, gracias porque por medio de tu Santa Palabra nos instruyes para no pecar, por medio de ella nos das las pautas para vivir una vida con propósito; perdónanos si no hemos sido esforzados porque sabemos que eso demandas de nosotros, ayúdanos, en el nombre de Jesucristo, a que nazca en nosotros esa sed de conocer de ti, amén.

Pido al Padre que este hermoso, glorioso, lunes seas colmado de bendición y paz, que siempre camines en rectitud delante de Padre y que todo lo que hagas sea grandemente prosperado. Bendiciones.

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